Carme García Yeste
El proceso migratorio no es algo nuevo en nuestras fronteras, ni nuevo en las últimas décadas. Aunque, tal y como afirma la Organización Internacional para las Migraciones en su informe de 2020 (OIM, 2021a), en los dos últimos años se han producido grandes movimientos de migración y desplazamientos. Los más importantes, según destaca el informe, se han producido a causa de los conflictos bélicos en Siria, Yemen, la República centroafricana, la República Democrática del Congo y Sudán del Sur; la violencia extrema que sufren colectivos como los Rohingya, que tuvieron que moverse a Bangladesh o la inestabilidad económica que sufren algunos países como Venezuela. Estos movimientos de población generan un gran sufrimiento a las personas que deben realizarlos, encontrando graves obstáculos derivados de las políticas migratorias que permiten utilizar la violencia tanto a través de muros, vallas y otras barreras físicas, como la violencia policial y del ejército, que no duda en usar la fuerza para detenerles o no socorrer las pateras y cayucos que intentan llegar a Europa.
En datos de diciembre de 2021 (IOM, 2021b), en rutas migratorias hacia Europa, y dentro de Europa, se han registrado 2.720 muertes. Siendo 2021 el año con más fallecimientos desde 2014. Desde enero de este año, además, han muerto o desparecido, intentando llegar a España en pateras o cayucos, al menos 99 niños/as y 248 mujeres. Diversas organizaciones acusan a la Unión Europea de haber creado en sus fronteras exteriores (en Grecia, España, Italia, etc.) un cementerio de niños y niñas bajo su indiferencia (Save the Children, 2021).
Estos escalofriantes datos nos dan sólo una idea de lo que es el intento de paso por la frontera. Pero existen otros datos, vivencias y sufrimiento que no se conocen. Son todas las situaciones que deben vivir las personas que inician un proceso migratorio y que, debido a las políticas fronterizas de los países, deben escoger vías migratorias muy peligrosas. Algunos procesos migratorios duran años hasta conseguir acercarse a Europa; durante ese proceso, tanto hombres, como mujeres, niños y niñas, sufren torturas, esclavismo, violencia sexual, etc.
Existen muchas investigaciones que muestran esta violencia, especialmente en colectivos muy vulnerables como son las mujeres. Los resultados de estas investigaciones muestran que, en el caso de mujeres africanas, desde el origen de su viaje (incluido el reclutamiento), el propio viaje y el destino, están expuestas a la violencia en todo momento, siendo víctimas de violaciones, embarazos no deseados y víctimas de trata con finalidad de explotación sexual (Merodio, 2020). Otras investigaciones, realizadas en las mujeres migrantes en México, mostraba que seis de cada diez mujeres y niñas eran víctimas de agresiones sexuales durante el viaje, haciendo que algunas de ellas llegaran embarazadas frutos de estos abusos (García-Yeste, 2021). La violencia sufrida, la situación de irregularidad en la que viven al llegar a Europa y la falta de un apoyo para su subsistencia las aboca a ser víctimas de explotación sexual, como mostró una investigación realizada en Irlanda, en la que el 94% de mujeres prostituidas, eran de origen inmigrante (Joanpere, 202).
Existen muchas entidades, tanto civiles como religiosas, que más allá de una ideología o creencia buscan aportar, en medio de esta barbarie, un poco de humanidad. Una humanidad que da aún más sentido a nuestra idea de un mundo sin fronteras, dónde el apoyo mutuo es la base para una sociedad más justa, libre y humana.
Este verano, tuve la suerte de poder ir a Nador y conocer el trabajo que está realizando la Delegación Diocesana de Migraciones. Un trabajo, iba a decir a dos bandas, pero sería mentira, hacen un trabajo a infinitas bandas. Pero por resumir, por un lado, la delegación apoya el trabajo del centro Baraka. Un centro que ofrece formación a jóvenes, mayoritariamente marroquís, que han sido expulsados del sistema educativo formal. Pueden asistir chicos y chicas de 15 a 30 años para poder formarse en costura, cocina y pastelería, informática y lenguas (árabe, francés, español e inglés). Una manera de ofrecer una alternativa a los y las jóvenes para que puedan encontrar un lugar de trabajo y, en el caso de no querer migrar, no verse obligados a tener que arriesgar sus vidas cruzando el Mediterráneo por no tener formación u oportunidades laborales. Además, en Baraka, se hace especial incidencia en la formación de las mujeres, sumando espacios de formación dirigidos exclusivamente para sus necesidades concretas.
Por otro lado, la Delegación trabaja para mejorar el estado de salud y las condiciones de vida de las poblaciones migrantes, que después de meses, e incluso años, de viaje desde sus países de origen llegan a Nador. Un viaje que, como hemos comentado al inicio, está lleno de obstáculos, violencia y mucho dolor. En Nador deben pagar a nuevas mafias si quieren cruzar saltando la valla, algo que se ha convertido, por la extrema vigilancia y violencia, tanto del gobierno marroquí como el español, en una misión muy peligrosa y prácticamente imposible; o cruzar en pateras o cayucos, que por esta misma vigilancia y violencia ha desviado a muchos migrantes hacia El Aaiún, en el Sahara Occidental, para llegar a Canarias por la que es, hasta ahora, una de las rutas más arriesgadas para llegar a Europa. La Delegación Diocesana de Nador les ofrece un lugar dónde poder quedarse en el caso de estar heridos, mujeres que acaban de tener un bebé, u otras situaciones complejas. Con un equipo médico que acude dónde se le necesita y ofreciendo un lugar dónde poder realizar consultas médicas, jurídicas o sociales, y cómo no, aliento y refugio. No es fácil, son personas que han sufrido mucho, que están en situación irregular, que han perdido en muchos casos la esperanza y que volver atrás no es viable y seguir adelante parece una misión imposible.
Junto a este proyecto de la Delegación está el taller de costura para migrantes subsaharianas, dónde con la maravillosa Auxilio al frente, se forman de manera rigurosa en costura a mujeres sin recursos, tanto de marruecos como las mujeres migrantes que acuden al servicio de la Delegación (Bayarte, 2021).
También, una de las grandes tareas realizadas por voluntariado y equipo de trabajadores y trabajadoras es informar de la aplicación gratuita para móvil REF AID – Humanizando la frontera sur. Esta plataforma digital ofrece acceso a la información y a la red de servicios (alimentación, asistencia médica, refugio, etc.), seguros disponibles para las personas que realizan una ruta migratoria a ambos lados de la Frontera Sur. De manera que, en cualquier país o lugar por el que estén transitando, puedan tener acceso a servicios gratuitos y seguros para poder estar seguros y seguras.
Y podría seguir con una lista interminable de servicios, apoyos e información que ofrecen y no sería comparable con toda la humanidad, valentía y fuerza con la que asumen esa tarea las personas que están allí o que ofrecen voluntariado por unos meses o años. Un espacio que está más allá de ideologías o religiones, un espacio de humanidad dónde la ilógica de un mundo con fronteras que asesinan les empuja a no rendirse a pesar de las dificultades.
No puedo recordar todos los nombres de las personas que de una manera u otra dejaron huella en mí y han hecho que ahora también formen parte de lo que soy, así que sólo puedo agradecérselo a todos ellos y ellas a través del incansable Àlvar, el revolucionario Joaco, la acogedora Auxilio, la dulce Silvana, la incombustible Maje, la increíble Mercè, Clara, Claudia, Esther, Oriol…
Bibliografía
Bayarte, P. (2021). Migrantes subsaharianas en Marruecos: coser y esperar. El País, 16 de diciembre de 2021. https://elpais.com/planeta-futuro/2021-12-12/migrantes-subsaharianas-en-marruecos-coser-y-esperar.html
García-Yeste, C. (2021). La caravana migrante hondureña es parada con el uso de violencia en Guatemala. Diario Feminista. https://eldiariofeminista.info/2021/01/19/la-caravana-migrante-hondurena-es-parada-con-el-uso-de-violencia-en-guatemala/
IOM (2021a). World Migration Report 2020. https://publications.iom.int/system/files/pdf/wmr_2020.pdf
IOM (2021b). Este año las muertes de migrantes aumentan y llegan a 4.400: La OIM registra más de 45.000 desde 2014. https://www.iom.int/es/news/este-ano-las-muertes-de-migrantes-aumentan-y-llegan-4400-la-oim-registra-mas-de-45000-desde-2014
Joanpere, M. (2021). Datos reveladores en Irlanda evidencia que el 94% de las prostitutas en Irlanda son mujeres migrantes. Diario Feminista. https://eldiariofeminista.info/2021/06/23/datos-reveladores-en-irlanda-evidencian-que-el-94-de-las-prostitutas-en-irlanda-son-mujeres-migrantes/
Merodio. G. (2020). Experiencias de violencia de género entre mujeres migrantes africanas. Diario Feminista. https://eldiariofeminista.info/2020/11/05/experiencias-de-violencia-de-genero-entre-mujeres-migrantes-africanas/
Proyecto Migrantes Desaparecidos (2021). Datos. https://missingmigrants.iom.int/es/region/el-mediterraneo
Save the Children (2021). Los niños y niñas mueren en las fronteras de Europa. https://www.savethechildren.es/actualidad/ninos-ninas-mueren-fronteras-europa?fbclid=IwAR25LvImk5PytT61sBMPsBRTclPHj3ONR2RxUCqXk0hqCE8nvip1XXtQHAc
Notas