Salomé Moltó
¿Se puede creer que la lectura que hacemos de historias, o textos diversos, pueden influenciar en nuestra
forma de pensar? ¿Qué influencia recibimos de escritores de otras culturas, costumbres y valores?
Es indudable que buscar la tesis de un científico, médico o investigador es porque estamos interesados
en su trabajo, que, por supuesto, incluye su opinión y que los estudiantes de cualquier carrera están obligados
a consultar, pero ello ¿influye en nuestra opinión o por el contrario rechazamos la investigación del
científico porque no refleja nuestra propia opinión previa? Es un tema muy delicado, que puede tener tantas
opiniones a favor como en contra, y eso en el terreno científico, donde podemos llegar a una comprobación,
pero ¿y en literatura? En este tema estoy totalmente a favor de que algunos literatos pueden influenciarnos
considerablemente y algunos hasta enamorarnos.
En mi 17 cumpleaños, y haciendo un esfuerzo económico, me regalaron un libro del autor Stefan Zweig,
con hermosas historias, un libro que se convirtió en mi amante, ya que todas las noches me dormía abrazada
a él. Eran años de represión y hambre, en los que tener un libro era algo extraordinario. Luego conocí a Julio
Verne, con sus fantásticos viajes, y, después, a Victor Hugo, que me enamoró. He leído todas sus obras,
Notre-Dame y “L’homme qui rie”. Era saber la vida horrible de la mendicidad, sobre todo Los Miserable
(impresionante estudio sociológico). Eliseo Reclus, en “El hombre y la tierra”, sin olvidar, por supuesto,
a Proudhon, ni al alcoyano V. Botella Pastor, con el que mantuve una muy interesante correspondencia, a
Benito Pérez Galdós, Valle Inclán para saber de nuestra historia social etc. En poesía, Machado, Campoamor,
Garcia Lorca etc. En el despertar de una profunda inquietud ante la tecnología que empezaba a aflorar,
todos estos autores, a parte de otros muchos, han logrado captar nuestro interés en saber cómo nació y se
desarrolló una evolución que sigue su marcha, cada día más compleja y que ya nos desborda.
Estos autores, con sus ideas e historias narradas con tanta belleza, nos han hecho palpitar con el sentir,
saber y pensar en otras dimensiones, llegando a lo más profundo de nuestras mentes y despertando sentimientos,
unas veces ignorados y otras medio olvidados, que anidan en nuestro profundo ser.